jueves, 7 de enero de 2010

PREMIOS


Querida Gloria, me honra tu premio porque tu amistad es hermosa.

Muchas gracias cariño, un beso.



Querida
Rosa , muchísimas gracias por compartir este premio acordándote de mi. Estoy orgullosa de tener un premio viniendo quien quiero y admiro.

Un abrazo.

BIENVENIDO 2010


Por fin terminaron las fiestas.

Para mi gusto las fiestas navideñas duran mucho tiempo. Está claro que para unos duran menos, para los niños sobre todo ya que ellos no tienen cole y jugar es su prioridad. Pero para los que hemos de estar pendientes de que todo esté lo mejor posible, que no se olvide nada, compras, preparativos, comidas extras, además del trabajo cotidiano de siempre, pues... ¡Uf! menudo descanso siento ahora, jajajajaja.

La mejor parte es que podemos estar juntos. Durante esos días disfruto mucho de la presencia de mis hijos y nietos. Ellos son el leit motive de mi vida. Y a pesar del cansancio de estas fechas ya estoy contando los días que faltan para volvernos a ver.

AÑO NUEVO




Año Nuevo

A las doce de la noche, por las puertas de la gloria
y al fulgor de perla y oro de una luz extraterrestre,
sale en hombros de cuatro ángeles, y en su silla gestatoria,
San Silvestre.

Más hermoso que un rey mago, lleva puesta la tiara,
de que son bellos diamantes Sirio, Arturo y Orión;
y el anillo de su diestra hecho cual si fuese para
Salomón.

Sus pies cubren los joyeles de la Osa adamantina,
y su capa raras piedras de una ilustre Visapur;
y colgada sobre el pecho resplandece la divina
Cruz del Sur.

Va el pontífice hacia Oriente; ¿va a encontrar el áureo barco
donde al brillo de la aurora viene en triunfo el rey Enero?
Ya la aljaba de Diciembre se fue toda por el arco
del Arquero.

A la orilla del abismo misterioso de lo Eterno
el inmenso Sagitario no se cansa de flechar;
le sustenta el frío Polo, lo corona el blanco Invierno
y le cubre los riñones el vellón azul del mar.

Cada flecha que dispara, cada flecha es una hora;
doce aljabas cada año para él trae el rey Enero;
en la sombra se destaca la figura vencedora
del Arquero.

Al redor de la figura del gigante se oye el vuelo
misterioso y fugitivo de las almas que se van,
y el ruido con que pasa por la bóveda del cielo
con sus alas membranosa

Rubén Darío